¡Felices 10 años querido Juampi!

Es increíble como el 2008 que para casi todos fue hace un tiempito se cuenten como ¡10 años atrás!
El día que Juan Pablo nació fue bastante confuso, entre sueños me avisó papá que se iban porque Juan iba a nacer, el mismo día que tenía un escrito de inglés que no quería hacer porque era del inglés del colegio. Nació el día que yo tenía planeado ir en bicicleta hasta la librería a comprarme un libro nuevo de Hannah Montana. Y ese día no sólo me salvé de ese escrito horrible, y me compré mi ansiado libro.
Ese día tuve un hermano.
Uno por que el que esperé 11 años.
Un hermano que era según todo el mundo enorme pero para mi era un bebé chiquitito, verán que nunca logré superar lo de bebé chiquitito porque aún se lo digo 😂.
Mis amigas que ya tenían hermanos, jugaban con ellos, los pelaban, se reían de su forma de decir las palabras, y yo sabía que con un recién nacido todavía no podía ponerme al día. Entonces invente el concurso de lenguas que constaba en que Juan bebé sacaba la lengua a explorar y yo anunciaba el concurso y la sacaba también. Sin saber que nunca iba a poder hacer lo que mis amigas si, en la forma convencional.
Desde el principio encontré momentos para nuestros juegos, si hoy me pidieran que piense como se me ocurren hacer cosas con mi hermano simplemente no lo sé, salen espontáneamente.
En el top ten actual de momentos de hermanos favoritos es:
1) saltar en la cama elástica
2) subirnos juntos a la elíptica
3) grabarnos con filtros de Instagram o Snapchat
4) chocar los 5 y los 10 (con conocimientos de chocar los puños)
5) mirar videos musicales
6) hamacarnos
7) sacarnos selfies
8) jugar en la piscina
9) tocarse la nariz haciendo el efecto de sonido piiiii
10) hacernos los dormidos cuando llegan papá y mamá.
Hoy no voy a hablar de lo mucho que nos cambió la vida o de cuán diferentes somos en casa, para eso tengo el resto del año. Hoy escribo este post para contarles que en este momento mi casa está llena de globos con formas de animales, velas, comida sin gluten sin caseina sin azúcar refinado y sin soja especialmente para él. En unas horas mi casa no se va a llenar de niños como en los demás cumpleaños de 10 del mundo, quizá los únicos niños que vengan sean mis primos, pero no nos pone tristes porque con ellos es con quienes más conecta.
Y si quieren saber cómo está Juan, la respuesta es radiante, va y vuelve con los globos, se emociona cuando le decís que es su cumpleaños, y cuando levantas las dos manos para indicar el número 10 él también levanta las suyas.
Así que solo resta decir ¡FELICES 10 QUERIDO JUAMPI!
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Con alegria les cuento que hoy el blog estrena Instagram pueden seguirlo @unahermanamayor 😁